Según los valores de Ingestas Dietéticas de Referencia para Población Española (FESNAD, 2010), los requerimientos de micronutrientes (vitaminas y minerales) que se ven aumentados a partir de los 70 años, (algunos incluso a partir de los 60 años), son la vitamina B6, la vitamina C, la vitamina D, el calcio, el hierro y el zinc.
– La vitamina B6 se encuentra en el hígado, el pollo, el pescado, los plátanos, las patatas, las alubias secas, los productos de grano integral y muchas otras frutas y verduras.
– La vitamina C se encuentra básicamente en frutas y verduras, principalmente los cítricos, (naranja, mandarina, pomelo, limón), las fresas, el kiwi, el pimiento…
– La vitamina D se encuentra en pescados, huevos, setas, quesos y en productos enriquecidos como cereales de desayuno o leche. Pero también la podemos obtener a través del sol.
– El calcio se encuentra en la leche, el yogur y los quesos, pero también en frutos secos como las almendras o los pistachos o en los pescados pequeños como las sardinas (si nos comemos sus espinas).
– El hierro se encuentra, en su mejor forma de absorción, en carnes, bivalvos (berberechos, mejillones, almejas…), en ciertas vísceras como el hígado… y, combinados con alimentos ricos en vitamina C, también se puede absorber mejor el hierro presente en las legumbres, como las lentejas, en los frutos secos, semillas y verduras de hoja verde.
– El zinc se encuentra en carnes y mariscos, cereales de grano entero, frutos secos y semillas.
Por eso es muy importante tener planificada una correcta dieta en todos los servicios de ayuda a domicilio para personas mayores. La alimentación es la base de su bienestar y no se puede obviar que no pueden seguir nutriéndose como años atrás. Si las necesidades son distintas se debe adaptar su dieta y crear hábitos alimenticios adecuados.